He ocasionado varios campos en las dos semanas pasadas que desafortunadamente demuestran lo que se llama raíces en forma de jota.

Raíces en forma de jota en la fresa ocurre cuando la raíz resulte demasiada larga para el agujero que se haya hecho para colocarla y subsecuentemente las extremidades de raíces se dirigen hacia arriba. Frecuentemente, tales raíces resultan estar fuera del hoyo de plantación expuestas al aire libre, como se puede ver en la segunda foto abajo.

No es difícil entender porque raíces en forma de jota no benéfica por nada a la planta. Extensión de raíces toma lugar desde las extremidades de raíces, y al estar afuera en el air libre, secándose y al final muriendo por cierto no ayuda la planta en este proceso y representa una pérdida al establecimiento de la planta. Francamente, es una práctica mala trasplantar en esta manera.

El trabajo del trasplante es muy duro, y no es difícil de tener empatía y entender como fácil es estar plantar raíces en forma de jota. Los productores pueden facilitar el trabajo de sus empleados y llegar de tener raíces bien hacia abajo por varias maneras. Por lo cierto, ya tener un hoyo hondo listo para colocar el trasplante ayuda muchísimo. Aún más, el productor puede pedir del vivero (la “nurseria”) podar las raíces para reducir su largor para facilitar su plantación correcta. Control de la calidad en el campo el día mismo del trasplante por la persona responsable también asegura que plantación en forma de jota no torna a ser un hábito de un empleado o el equipo entero.